
Varias fueron las propuestas que a lo largo del último año fuimos analizando respecto el planteo de la urbanización del barrio. Hubo diferentes factores que fueron tenidos en cuenta pero partimos de los acuerdos construidos por todos los vecinos en conjunto. Podemos resumir estos acuerdos en la concepción de que "el proyecto se adapta a la naturaleza y no la naturaleza al proyecto".
Entonces, lo primero que tuvimos que reconocer fueron los diferentes ambientes del lote, sus particularidades de relieve, de suelo, de vegetación para conocer su fragilidad y de esta manera decidir urbanizar sólo en las áreas donde no se comprometa la calidad ambiental.
Avanzando con los acuerdos, recordamos que se decidió ocupar la superficie mínima de terreno posible dejando libre, al menos, el 50% del lote, evitar la impermeabiluización del suelo y preservar las áreas de alto valor paisajístico.
Profundizando los criterios de intervención se fue acordando una gradualidad donde sería posible establecer una mayor densidad de viviendas (viviendas agrupadas y / o de dos pisos) en las zonas planas, sin árboles de valor y mayor accesibilidad a ruta, infraestructura, equipamientos y servicios (rojo). Así esta densidad disminuiría progresivamente adentrándose en el lote hacia las áreas más cercanas al bosque protector y a las pendientes como se esquematiza en la imagen.

- SOCIAL: espacios que quedan cercanos y protegidos por las viviendas
- PRODUCTIVO: espacio ya intervenido apto y suficiente para proyectos agrícolas intensivos
- COMERCIAL Y SERVICIOS: espacios comunitarios que dan sobre la confluencia de rutas, aptos para proyectarse a escala barrial, local o regional
- RECREATIVO: espacios de alto valor paisajístico sobre el borde del bosque protector aptos para su contemplación y goce a escala barrial, local y regional
Considerando toda la información relevada y compartida con los vecinos, todos los acuerdos alcanzados y los criterios desarrollados se fue moldeando, fue tomando forma más o menos definitiva la propuesta de urbanización del primer sector del Barrio Intercultural (tengamos en cuenta que al norte del arroyo Cull Rañi quedan aprox. 25 hectáreas más pensadas para una segunda etapa).
Después de mucho trabajo por parte de tod@s la urbanización se va convirtiendo en un proyecto concreto. En la imagen se pueden visualizar la disposición de las 16 islas o agrupamientos de casas, el trazado de los caminos (calles y sendas peatonales) y la variedad de infraestructura comunitaria pensada para el barrio.
Nos parece que va quedando bonito, ¿no?